domingo, 30 de marzo de 2008

No, no hablo de eso

De cuando una entrevista se vuelve insostenible...

Mañana lunes realizaré la segunda entrevista, quizás la más "inaccesible" y formal de las dos que programé para este fin de semana. Solo puedo adelantar que es un artista plástico de gran experiencia y muy reconocido, no solo en nuestra ciudad sino también en el país y el mundo. La idea de estar frente a una persona de su edad y su caudal de vivencias ya plantea una escena de respeto y algún tipo de nerviosismo. El respetar al entrevistado es lógicamente un procedimiento ético ineludible y sano, pero yo me refiero a otro tipo respeto: aquel que se practica a la fuerza y “a toda costa”, cuando el entrevistado es mayor a uno en edad (en este caso prácticamente la cuadriplica), y principalmente cuenta con una personalidad totalmente desconocida.

Esto me rememoró las ideas vagas que Andy Warhol exponía ante las preguntas que le realizaban los cronistas y entrevistadores, en diferentes épocas incluso. No estoy asustado, pero existe en mí una suerte de sospecha inusitada y sin fundamentos de recibir una posible respuesta con puros monosílabos (como las de Warhol) ante mis preguntas. Ya veremos que sucede, espero no transpirar ante una entrevista insostenible.

Retomando el tema Warhol, encontré en You-Tube el video incluido a continuación; Una entrevista en la presentación de la obra/experimentación/instalación/exposición basada en las famosas cajas Brillo.

Las cajas de esponjas brillo, eran un simple elemento cotidiano que se podían encontrar en cualquier depósito de almacenes, hasta que el artista las separó y enarboló como quien destaca una obra visual de un artista virtuoso y talentoso, y la pone en un museo: este fue un paso más en su intento de redefinición de lo que es arte y su relación con el estilo: el advirtió arte en esas simples cajas, intentando demostrar que es más importante el estilo que la definición del arte mismo.

Sin querer reivindicar o hundir el arte clásico mediante esta práctica, causó el revuelo lógico en la sociedad, similar al del mingitorio de Duchamp en otra de las vanguardias estéticas: La idea de que no es una vulgar caja, sino una obra de arte realizada mediante su exposición, denota la vida en esta sociedad de masas y toda su implicancia.

Actualmente podemos ver, como un detalle de diseño, las cajas brillo apiladas en el despacho del personaje de Carla Peterson, en la comedia televisiva nacional “La Lola”. El despacho está ubicado en la redacción de una revista, donde muchos objetos pop-art están diseminados, al igual que en otros espacios donde se filma la tira.

A continuación la entrevista a Warhol. 30 segundos de duración.

1 comentario:

H€®ny$$ dijo...

Que bueno el poder complemetar los relatos, en forma de ejemplo, de muchos textos en donde o se parafrasea a un personaje o se lo sita textualmente con imagenes de este. Sin dura ver un video de Warhol reproduciendo su peculiar modo de responder frente a las preguntas de la periodista ayuda a completar el circulo que trazan los textos.